La tormenta Boris ha causado estragos en Europa Central y Oriental, dejando un saldo de 23 personas fallecidas en países como Polonia, Austria y la República Checa. Las intensas lluvias han generado graves inundaciones que afectaron a varias regiones, y las autoridades continúan evaluando los daños.

En Polonia, el ministro del Interior, Tomasz Siemoniak, informó sobre la trágica pérdida de siete vidas, advirtiendo que la cifra podría aumentar mientras continúan las labores de búsqueda. Además de Polonia, países como Eslovaquia y Rumanía también han sufrido los efectos de la tormenta.

En la República Checa, más de 60 mil hogares quedaron sin electricidad debido a las fuertes tormentas. En Austria, la capital, Viena, ha visto cómo numerosos árboles han sido derribados, y las líneas férreas y parques permanecen cerrados al público por seguridad.

El Gobierno polaco ha movilizado a miles de militares y equipos de rescate para hacer frente a la crisis, declarando un estado de desastre natural por 30 días. Los expertos comparan la magnitud de esta tormenta con las devastadoras inundaciones registradas en 2002.

Fuente: teleSUR